viernes, 22 de febrero de 2013

Łódź: decadencia de un pasado con futuro.

Las malas lenguas tenían razón. Łódź es una ciudad fea, gris, la máxima expresión de la decadencia polaca tras la 2ªGM, el declive arquitectónico, la vejez de lo sobrevivido… Pero en esa fealdad reside un atractivo con un potencial infravalorado. Me atrevería a decir que Łódź es una pequeña Berlín en potencia que, aunque empieza a hacer pinitos, todavía necesita ser descubierta.

viernes, 15 de febrero de 2013

Łódź



Pensaba que la decadencia de los trenes serbios era insuperable, incluso los trenes marroquíes visten con mayor encanto, pero hoy he descubierto que el Regional 7124 que une las ciudades polacas de Poznan y Lodz se lleva la palma. Cinco largas horas de traqueteos constantes, chirridos y parones para recorrer tan solo 250 km. Deberían cambiar el nombre de este tren y llamarlo algo así como “feria ambulante”, porque hasta el olor a fritanga ha viajado con nosotros gracias a los bocadillos que medio tren ha sacado a la hora de comer. Tal ha sido la función que he llegado a echar de menos el cinturón de seguridad en algunos tramos, y eso que no creo que hayamos superado los 60km/h.

Aún así, mi enamoramiento por este medio de transporte y por Polonia no cesa. Esta es la decima ciudad polaca que visito en los 5 meses que estoy a punto de cumplir aquí, el 18 de febrero exactamente. Prefiero no pararme a pensar en los kilómetros recorridos (más de 5.000) ni mucho menos en las horas de tren a mis espaldas.